La violencia en Ecuador cobró una nueva víctima en el mundo del fútbol.
El exjugador de Liga de Quito e Independiente del Valle, Jonathan "Speedy" González, fue asesinado a los 31 años en un ataque armado en la provincia de Esmeraldas.
El crimen ocurrió el viernes 19 de septiembre en el interior de una vivienda, donde una segunda persona también perdió la vida.
González, que en su carrera jugó en equipos internacionales como el Olimpia de Paraguay y el León de México, se encontraba actualmente en el club 22 de Julio de la Serie B. La policía investiga las causas del ataque en una provincia fronteriza con Colombia, afectada por la violencia de bandas narcotraficantes.
Con la muerte de González, ya son tres los futbolistas asesinados en lo que va de septiembre.
Días antes, el 10 de septiembre, los jugadores Maicol Valencia y Leandro Yépez, ambos del equipo Exapromo Costa, murieron en un ataque en la ciudad de Manta. Yépez, que había quedado gravemente herido, falleció en el hospital. Según el club, ellos fueron víctimas colaterales del ataque.
Esta ola de crímenes se enmarca en la creciente violencia en Ecuador.
El país ha visto cómo la tasa de homicidios se disparó de 6 por cada 100,000 habitantes en 2018 a 38 en 2024, alcanzando un récord de 47 en 2023.
Equipos como la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF), así como clubes locales, han expresado sus condolencias y luto por las trágicas pérdidas.
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