Una familia de la localidad de Toledo, en Canelones, denunció que la Policía ingresó a su vivienda de forma errónea en el marco de un allanamiento, dejando la casa con daños materiales y a sus ocupantes con un profundo trauma emocional. La situación, ocurrida el pasado 22 de julio, ya se encuentra en manos de la Justicia.
Según el relato de Estela Benítez, quien vive en la casa junto a su madre de 58 años (quien padece una discapacidad), los agentes entraron con violencia, los hicieron tirarse al piso y les apuntaron con armas de fuego. "Pensamos que era un robo, pero no, un allanamiento", afirmó.
Durante el operativo, que duró más de una hora, la Policía no informó a la familia qué o a quiénes estaban buscando. Además de la tensión, los efectivos rompieron la puerta principal y la del cuarto de la madre de Estela, quien entró en un estado de crisis de nervios sin que ningún funcionario le ofreciera asistencia.
El abogado de la familia, Rafael Silva, está llevando el caso ante la Justicia para reclamar tanto los daños materiales como morales. "Lo material se arregla, pero la situación no te la olvidás más", sostuvo Benítez. La mujer afirmó que, tras el operativo, la Policía se disculpó por teléfono, pero "se fueron, quedó todo roto y nadie se hizo cargo".
_2.jpeg "Asaltantes se llevan más de $2.000.000 de un local de pagos")
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