Uruguay 3 - Chile 1 - Clase de buen fútbol en el comienzo de las eliminatorias

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Uruguay demostró su clase al vencer 3-1 a Chile en el partido inaugural de las Eliminatorias. La selección celeste comenzó su camino hacia el Mundial con un juego colectivo excepcional y destacadas actuaciones individuales.

FOTO-AUF.TV

La celebración fue completa, ya que siempre es una fiesta iniciar un camino hacia el Mundial, y aún más emocionante cuando se comienza con victorias.

El equipo dirigido por Marcelo Bielsa salió con la determinación de ganar y lo logró con una actuación formidable, en ocasiones dominando por completo a Chile. Nicolás de la Cruz fue elogiado y ovacionado debido a sus dos goles y su destacada actuación, que lo convirtió en la figura del partido. Mostró un desempeño excepcional, destacándose en el campo de juego como si estuviera en su terreno de juego habitual, pero en una cancha de mayores dimensiones. El segundo gol fue obra de Federico Valverde, quien ahora lleva el brazalete de capitán y sigue rindiendo al más alto nivel.

La presión es una constante en el fútbol, es el condimento picante que lo hace emocionante. Puede ser como un arma de doble filo, ya que existe la presión positiva que los jugadores experimentan, esa sensación de nervios en el pecho que los impulsa, y también está la presión derivada de la responsabilidad de iniciar un nuevo ciclo, en el que los atletas, sin importar si previamente defendieron los colores celestes, deben asumir el liderazgo.

Además, existe la presión en el juego en sí, cuando un equipo ejerce presión sobre su oponente como táctica para dificultar su juego (y viceversa). Esto se hizo evidente en los primeros minutos del partido, ya que los entrenadores conocen las tácticas del otro equipo y sus jugadores. Hubo 15 minutos iniciales en los que predominaron las presiones, tanto las aplicadas por los jugadores como las del juego táctico. A pesar de ello, el ritmo del partido se mantuvo alto y demandante, sin que nadie pudiera darse el lujo de relajarse.

En el primer tiempo, Uruguay logró romper la presión ejercida por Chile. La selección celeste creó su primera oportunidad de gol a los 13 minutos, gracias a una espectacular carrera de Darwin Núñez. Fue un sprint impresionante, en el que dejó atrás a los defensores chilenos como si fueran postes. Aunque el arquero Brayan Cortés logró detener el disparo, este enfrentamiento se repetiría más adelante.

El primer gol fue una joya: es difícil encontrar precisión para el pase a 200 kilómetros por hora; sin embargo, Uruguay la tuvo, a esa velocidad el centro rastrero fue para Darwin, que tiró una pared de campito con De la Cruz, y como en el campito salieron gritando el gol.

Momentos mas tarde, De La Cruz recuperó una pelota crucial en el centro del campo tras un error en la salida del equipo chileno. De inmediato, habilitó a Núñez en un mano a mano, pero el jugador del Liverpool perdió el duelo ante Brayan Cortés, el arquero chileno, quien desvió el balón al tiro de esquina. En el cierre de la primera mitad, De La Cruz avanzó por el lado izquierdo con espacio y, en lugar de centrar el balón, optó por un pase cruzado hacia Federico Valverde. Valverde se preparó para un disparo de zurda desde la distancia, pero cambió de dirección hacia su derecha, encontró un hueco y remató cruzado para anotar el segundo gol, estableciendo el marcador en 2-0.

En la segunda mitad, el patrón del partido no cambió. Con más espacio debido a la necesidad de Chile de buscar el descuento, Uruguay encontró más oportunidades para desplegar su mejor fútbol. A los 25 minutos, lograron anotar el tercer gol en una excelente acción colectiva entre sus tres principales jugadores: Valverde, Núñez y De La Cruz. El centrocampista del Real Madrid condujo el balón por el centro y habilitó al delantero del Liverpool en el área. Núñez, en lugar de ser egoísta, buscó al jugador de River Plate en el otro palo, quien simplemente tuvo que empujar el balón al gol.

Parecía que la celebración de la selección celeste continuaría, pero el equipo dirigido por Toto Berizzo reaccionó de inmediato. En la acción siguiente, Arturo Vidal, quien había ingresado minutos antes, aprovechó un rebote en el área para marcar el 1-3 y generar un poco de incertidumbre en los últimos 15 minutos. Sin embargo, el marcador no volvió a moverse, y finalmente, Uruguay se llevó la victoria en Montevideo.

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