A fines de noviembre de 2018, en un terreno baldío de Casabó encontraron el cuerpo calcinado de un hombre de 64 años con varios golpes en la cabeza.
La investigación determinó que la víctima vivía en una casa a pocos metros del lugar donde fue hallado el cadáver, y que en la vivienda estaba durmiendo un desconocido que al verse rodeado por la Policía confesó que un amigo le había pedido que cuidara la casa porque él, su pareja y su cuñado habían matado al propietario para quedarse con la vivienda.
Según la sentencia judicial, a la que accedió el diario El País, la pareja y el cuñado asesinaron al dueño en el interior de la casa, mientras uno de los hombres le sostenía los brazos, el otro lo golpeaba con un martillo en la cabeza.
La Justicia condenó al homicida a 24 años de cárcel, al coautor a 22 años y a la mujer que planificó y engañó a la víctima a 21 años de prisión. Ella fue quien le tocó la puerta el día del crimen a las 4 de la mañana, él la conocía y por eso le abrió, la mujer le pidió un vaso de agua y fue ahí que los dos hombres aprovecharon para entrar y cometer el crimen.
Fuente / Subrayado
.jpg "Trabajadores de UTE descubrieron el cuerpo de un hombre de 36 años en una subestación")
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