La Dirección Nacional de Policía Científica logró identificar los huesos encontrados tras procesarlos en el Laboratorio Biológico.
Pertenecen a una mujer de 36 años que estaba desaparecida desde diciembre de 2019.
Allí obtuvieron el ADN de la víctima y al compararlo con la base de datos del Registro Nacional de Huella Genética establecieron su identidad. Esto se logró debido a que el padre de la víctima se había presentado voluntariamente meses atrás para brindar una muestra de su ADN.
Se trata de Mayra Acosta de 36 años, desaparecida los primeros días de diciembre de 2019. El 4 de enero de 2020 su familia realizó la denuncia correspondiente y, desde esa fecha, el caso fue tomado por el Departamento de Registro y Búsqueda de Personas Ausentes de la Dirección General de Lucha Contra el Crimen Organizado e INTERPOL.
Vecinos del barrio Unión alertaron a la Policía el pasado 22 de junio sobre la presencia de restos óseos ubicados al costado de un contenedor en las inmediaciones de Miguel Ángel y Rodríguez Castelao.
Posteriormente la Policía pudo establecer dónde se encontraría el resto de los huesos de la persona fallecida: una fosa séptica de una casa de la zona.
El Área de Investigaciones de Zona II trabaja para establecer cuáles fueron los hechos que derivaron en la muerte de Mayra Acosta.
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